
6 formas de detectar los aromas de un vino en 5 minutos
Guía rápida para detectar los aromas más comunes en el vino.
Detectar los aromas de un vino no es un talento reservado a sumilleres o expertos. Con un poco de práctica y las técnicas adecuadas, cualquiera puede entrenar su olfato para identificar las notas frutales, florales, especiadas o minerales de una copa.
Esta guía rápida te mostrará 6 formas sencillas de detectar los aromas de un vino en menos de cinco minutos, permitiéndote disfrutar aún más de cada degustación.
1. Observa y agita: el primer paso hacia los aromas
Antes de acercar la nariz a la copa, mira el vino. El color puede darte pistas sobre su perfil aromático: los vinos jóvenes suelen tener aromas frescos y frutales, mientras que los vinos envejecidos desarrollan notas más complejas como cuero o frutos secos.
Luego, agita ligeramente la copa para oxigenar el vino. Este gesto libera las moléculas aromáticas y las hace más fáciles de percibir.
2. Acércate en dos tiempos: nariz tranquila y nariz profunda
Acerca la nariz a la copa sin agitar y respira suavemente para captar los aromas más volátiles, como flores y frutas frescas. Después, agita el vino y huele de nuevo, ahora más profundamente. En esta segunda fase suelen aparecer notas más pesadas y complejas: especias, tostados o notas terrosas.
3. Clasifica mentalmente: aromas primarios, secundarios y terciarios
Los aromas primarios provienen de la uva y suelen ser frutales o florales (manzana, ciruela, violeta). Los secundarios aparecen durante la fermentación (pan, levadura, mantequilla). Y los terciarios nacen del envejecimiento (vainilla, cuero, tabaco).
Clasificar mentalmente te ayudará a organizar lo que percibes y a detectar los aromas con mayor claridad.
4. Usa la memoria olfativa: conecta con tus recuerdos
La nariz humana es capaz de reconocer miles de olores, pero necesita entrenamiento. Cuando huelas, asocia lo percibido con recuerdos o situaciones: ¿a qué fruta te recuerda?, ¿alguna flor del jardín de tu infancia?, ¿el aroma de una pastelería?
Este ejercicio refuerza tu capacidad para detectar los aromas en futuras catas.
5. Apóyate en un “kit de aromas” o en productos cotidianos
Los kits de aromas para vino son herramientas educativas que contienen frascos con esencias típicas (vainilla, frambuesa, pimienta).
Si no tienes uno, puedes practicar con ingredientes de la cocina: frutas, especias, café, chocolate. Huele y memoriza. Así, cuando aparezcan en la copa, los reconocerás al instante.
6. Haz una lista: escribe lo que percibes
Anota cada aroma que identifiques, sin miedo a equivocarte. Incluso si dudas, escribir ayuda a fijar sensaciones y a entrenar la mente para futuras catas.
Con el tiempo, podrás detectar los aromas con mayor rapidez y precisión, disfrutando más de la experiencia sensorial.
El arte de descubrir el vino a través del olfato
Detectar los aromas de un vino es como abrir un libro lleno de historias: cada copa es única y te invita a explorar un mundo de sensaciones.
Con estas seis técnicas, en solo cinco minutos podrás convertir cada degustación en un viaje aromático, enriqueciendo tu relación con el vino y afinando tus habilidades de cata.
