Estabilidad del Vino
La estabilidad del vino asegura su calidad y longevidad.
Este concepto abarca procesos químicos y físicos que preservan sabor, color y aromas.
Factores como temperatura, acidez y almacenamiento influyen en su estabilidad.
Los productores aplican técnicas específicas para evitar defectos como turbidez o cambios en el sabor.
Aprender sobre estabilidad mejora la conservación y el disfrute del vino.