
Nachos caseros
Si alguna vez te has preguntado cómo hacer nachos caseros crujientes y sabrosos, aquí tienes la receta definitiva.
Un clásico de la cocina mexicana que no solo es fácil de preparar, sino que también es una excelente forma de darle nueva vida a las tortillas de maíz del día anterior.
Perfectos como aperitivo, para compartir en reuniones o como base para unos auténticos chilaquiles.
Ingredientes para 4 personas
- 12 tortillas de maíz (preferiblemente del día anterior, de unos 12 cm de diámetro)
- Aceite para freír
- Sal al gusto
Cómo hacer nachos caseros paso a paso
1. Corta las tortillas
Coloca las tortillas de maíz en una tabla y córtalas en triángulos. Dependiendo del tamaño y tu preferencia, cada tortilla puede dividirse en 6 u 8 porciones. Consejo: deja que las tortillas se sequen ligeramente antes de cortarlas para evitar que se doblen.
2. Calienta el aceite
En una sartén amplia, calienta abundante aceite para freír a una temperatura de 170-180 ºC. Puedes comprobarlo colocando un trozo de tortilla: si burbujea rápidamente, está listo.
3. Fríe los totopos
Introduce los triángulos de tortilla por tandas, evitando que se amontonen. Fríelos hasta que estén casi dorados; recuerda que al sacarlos seguirán oscureciendo un poco.
4. Escurre y sazona
Retira los nachos caseros y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Espolvorea con sal al gusto mientras aún están calientes.
Maridaje: el vino ideal para tus nachos caseros
Aunque los nachos suelen acompañarse con cerveza, si quieres un toque gourmet, un vino puede ser el aliado perfecto.
Para los nachos sencillos con guacamole o salsas frescas, un Albariño DO Rías Baixas o un Sauvignon Blanc maridan a la perfección gracias a su acidez y notas cítricas que equilibran el aceite de la fritura y la intensidad de las salsas.
Si los vas a gratinar con queso o acompañar con chili, un Garnacha joven o un Tempranillo afrutado complementarán muy bien los sabores.
Nachos con guacamole

Para cerrar: conviértete en anfitrión de lujo
Preparar nachos caseros es mucho más que una receta: es un gesto para compartir, sorprender y disfrutar de un sabor auténtico.
Con un buen vino y la mejor compañía, tus totopos se transformarán en el aperitivo estrella de cualquier reunión.
