
Pulled Beef
Pulled Beef, receta fácil para una carne deshilachada irresistible. Una receta de pulled beef que conquistará todos tus platos.
El pulled beef o carne deshilachada de ternera es uno de esos platos que une lo mejor de la cocina lenta: sabor intenso, textura melosa y una versatilidad que te permite servirlo en tacos, bocadillos, pizzas o incluso lasañas.
En esta receta te mostramos cómo preparar en casa un pulled beef digno de food truck americano, pero sin complicaciones y con ingredientes fáciles de conseguir.
Gracias a una cocción larga y lenta al horno, la carne se vuelve tan tierna que podrás deshilacharla fácilmente con solo dos tenedores. Y lo mejor: todo se cocina junto en una sola fuente con una salsa rica y especiada que después se reduce para aportar aún más sabor.
El resultado es un plato suculento que puedes preparar con antelación y disfrutar en familia o en reuniones informales.
Ingredientes (8 raciones)
- 1 kg de aleta de ternera
- 2 cebollas
- 3 dientes de ajo
- 1 cucharada de comino molido
- 1 cucharada de pimentón dulce
- ½ cucharadita de guindilla en copos
- 1 cucharada de mostaza
- 2 cucharadas de azúcar moreno
- ½ vaso de vinagre de manzana
- ½ vaso de ketchup
- ½ litro de caldo de carne
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Bollitos de brioche (opcional, para servir)
Cómo hacer pulled beef al horno
- Prepara el horno y los ingredientes: Precalienta a 150 ºC. Pela y trocea las cebollas y los ajos.
- Haz la salsa: Tritura todos los ingredientes (menos la carne) en un vaso batidor hasta obtener una mezcla homogénea.
- Monta y hornea: Coloca la carne en una fuente de horno y cúbrela con la salsa. Tapa con papel de horno y aluminio, y hornea durante 5 horas.
- Deja enfriar y deshilacha: Una vez transcurrido el tiempo, deja que la carne se enfríe dentro del horno. Luego deshiláchala con dos tenedores.
- Reduce la salsa: Pon la salsa en un cazo y cuécela a fuego medio durante unos 30 minutos, removiendo para que espese.
- Combina y sirve: Mezcla la carne deshilachada con la salsa caliente y sirve en bollitos de brioche acompañados de coleslaw.
Maridaje: ¿Qué vino acompaña mejor al pulled beef?
El pulled beef, por su perfil especiado y ligeramente dulce, marida a la perfección con vinos tintos de cuerpo medio a alto. Te recomendamos un Zinfandel californiano, por sus notas afrutadas y su estructura firme que equilibran muy bien la intensidad de la carne y la salsa. También es ideal un Tempranillo reserva o un Syrah del Valle del Ródano, que aportan carácter sin robar protagonismo al plato.
Si prefieres algo más ligero pero igualmente sabroso, un Garnacha joven puede ofrecer frescura y frutas rojas que contrastan maravillosamente con el dulzor del pulled beef.
Un clásico americano que merece quedarse en tu recetario
El pulled beef no solo es fácil de hacer, sino que es de esos platos que mejoran con el tiempo. Puedes prepararlo con antelación, congelarlo o reutilizarlo en diferentes preparaciones durante la semana. Su versatilidad y su sabor lo convierten en una receta imprescindible si quieres impresionar sin complicarte.
Ideal para celebraciones, comidas informales o simplemente para darte un gusto, el pulled beef es una muestra de cómo una buena técnica de cocción puede transformar un corte sencillo en un bocado espectacular.
