
Spaghetti carbonara
Spaghetti carbonara, receta auténtica italiana en 25 minutos. Una receta que respira autenticidad italiana.
El Spaghetti carbonara es uno de los grandes tesoros de la cocina italiana. Más allá de su popularidad global, su esencia está en la simplicidad: pocos ingredientes, máxima intensidad de sabor y un respeto absoluto por la tradición. En esta receta, aprenderás a prepararlos de forma auténtica, tal y como se sirven en Roma, sin nata ni concesiones modernas.
Este plato es ideal como entrada contundente o como principal en una comida informal, y su preparación rápida lo convierte en un clásico salvavidas entre semana. El resultado: una pasta cremosa, salada y reconfortante que, cuando se hace bien, no necesita nada más.
Ingredientes por persona
- 100 g de espaguetis
- 30 g de guanciale (o panceta fresca como alternativa)
- 2 yemas de huevo
- 25 g de queso pecorino rallado (puede sustituirse por parmesano)
- Sal al gusto
- Pimienta negra molida
- Hojas de albahaca para decorar (opcional)
Cómo hacer Spaghetti carbonara auténtico paso a paso
- Preparar el guanciale: córtalo en dados pequeños y saltéalos a fuego fuerte, sin aceite, hasta que estén dorados y crujientes. Retira del fuego y reserva.
- Mezclar la salsa base: en un bol, bate las yemas con el queso pecorino hasta obtener una mezcla homogénea.
- Cocer la pasta: hierve los espaguetis en abundante agua con sal, según las instrucciones del paquete. Reserva un poco del agua de cocción.
- Emulsionar la salsa: añade la pasta caliente a la mezcla de huevos y queso. Incorpora un chorrito del agua de cocción para lograr una textura cremosa. Remueve rápidamente para que el calor de la pasta cocine ligeramente el huevo sin que se cuaje.
- Añadir el guanciale: mezcla con los trozos crujientes de guanciale y remueve.
- Emplatar y servir: termina con pimienta negra recién molida y, si lo deseas, un poco más de queso y albahaca fresca.
Maridaje ideal para Spaghetti carbonara
Para acompañar unos auténticos Spaghetti carbonara, elige un vino blanco seco y vibrante que equilibre la untuosidad de la salsa y resalte los matices del queso y el guanciale. Algunas excelentes opciones son:
- Verdicchio dei Castelli di Jesi DOC: vino italiano con buena acidez y notas herbáceas, perfecto para platos con grasa y queso.
- Albariño joven: fresco y cítrico, aporta ligereza y limpieza al paladar.
- Chardonnay sin barrica: suave y elegante, sin enmascarar los sabores de la carbonara.
Si prefieres vino tinto, opta por un Pinot Noir ligero, que respete la delicadeza del plato sin competir con sus sabores.
El arte de la sencillez bien hecha
Hacer Spaghetti carbonara auténticos no es difícil, pero requiere mimo y respeto por los ingredientes originales. Esta receta es el ejemplo perfecto de cómo menos es más cuando se sabe combinar lo esencial: grasa, salinidad, cremosidad y un buen toque de pimienta.
Prepararlos al estilo romano es una forma de rendir homenaje a la cocina italiana y llevar a tu mesa un plato que nunca decepciona.
